viernes, 14 de noviembre de 2014

¿Mitopóesis o Síndrome de Münchhausen?

Mitopoeta es el que fabrica mitos. Tolkien fue, por ejemplo, fue un mitopoeta, y lo fue también Homero y, el más grande de todos, el mismísimo Verbo. Lean si no, el libro de un monje argentino que apareció recientemente sobre el tema.
La persona afectada por el síndrome de Münchhausen finge síntomas de forma repetida y consistente, en ausencia de un trastorno, enfermedad o incapacidad somática o mental confirmados. En el plano somático el enfermo puede producirse a sí mismo cortes o erosiones para sangrar o inyectarse a sí mismo sustancias tóxicas. La simulación del dolor y la insistencia sobre el hecho de la presencia de sangre puede ser tan convincente y persistente que conduzca a investigaciones e intervenciones repetidas en varios hospitales o consultas diferentes, a pesar de la obtención de hallazgos negativos repetidos.
No sabemos si el Papa felizmente reinante es mitopoeta o sufre del síndrome de Münchhausen. Verdad es que no posee el talento y la imaginación de quienes lo han precedido en el mester de la mitopóesis, pero aun así no es fácil establecer un diagnóstico.
Veamos algunos ejemplos: El primero tiene ya varios años, y lo consumó a través del libro biográfico que escribieron sobre él dos periodistas amigos titulado El Jesuita. En él se construye el mito de que, durante la dictadura militar argentina, el P. Jorge Bergoglio, provincial de la Compañía de Jesús, protegió a sus súbditos y a muchos otros sacerdotes del poder siniestro de los militares que pretendían  “desaparecerlos”. (“La lista de Bergoglio”, se llegó a titular el episodio). Pero, como afirma el periodista Horacio Verbistky, lo cierto es que Bergoglio entregó a dos jesuitas medio zurditos –“Dénle un susto”, les habría dicho a los militares”-, y no se jugó por defender a ningún personaje de izquierdas que estuviera detenido ilegalmente. Más aún, está documentado que los padres Jalics y Yorio, ambos S.J., cuando son liberados de su secuestro y arrojados a una banquina de la ruta 202, llegan a un teléfono público y llaman al Colegio Máximo –residencia del provincial de los jesuitas-, se les comunica que ya no son jesuitas; que el Provincial (a la sazón, el P. Jorge Bergoglio) durante su secuestro los había expulsado de la Compañía. Y que mejor, ni se aparecieran por el Máximo u otra residencia S.J.. Que siguieran de largo al aeropuerto de Ezeiza, que allí tendrían dos pasajes disponibles para Alemania. Y así fue. Hoy el P. Jalics vive en zonas teutónicas y, cuando le fue requerida su opinión sobre el papa Francisco en relación al episodio del secuestro, respondió: "Todo perdonado, todo olvidado". Es evidente la alusión a una herida importante digna de perdón y olvido. Es cuestión de ver su declaración judicial del cardenal Bergoglio al respecto, y que circula por Youtube, para darse cuenta que solamente dice vaguedades y que, de no haber sido elegido Papa, hoy estaría procesado judicialmente.
Otro berrinche mitopoiético, o münchhausiano,  del papa Francisco, y que ha aflorado en los últimos meses, tiene que ver con la hagiografía. Me parece que, por las noches, comienza a rascar en el fondo de su memoria en busca de ejemplos de la vida de santos que lo impresionaron en su niñez y juventud, e intenta fabricarse un mito que tenga el éxito asegurado: ya hicimos referencia aquí al despellejamiento del estaría siendo objeto por parte de los sectores tradicionales de la Iglesia, tal como fue desollado San Bartolomé, y esta la semana pasada, el P. Molina nos anotició que el Santo Padre le dijo: “Que me maten es lo mejor que me puede pasar”, cual otro San Ignacio de Antioquía que, en camino desde su sede a Roma donde iba a ser martirizado, pedía a los fieles cristianos que no detuvieran su marcha hacia las palmas martiriales que le esperaban.
Pero hay otro caso más sugestivo. Se trata de un mito mucho mejor elaborado y que involucra, en este caso también, un largo escrito. Hace algunas semanas apareció un nuevo libro sobre el papa Francisco escrito por dos periodistas cordobeses, en el que relatan las dos estancias que pasó el pontífice en esa ciudad mediterránea argentina: la primera, durante su noviciado y, la segunda, luego de su periodo de provincial de la Compañía, entre los años 1991 y 1992.
No es extraño que dos cordobeses aprovechen la oportunidad comercial de escribir la biografía cordobesa de Bergoglio: cientos de co-provincianos comprarán el escrito. Pero sí resulta bastante raro que el mismo Papa se haya puesto en contacto con los escritores telefónicamente y por mail, a fin de brindarles más detalles de esos años. ¿Por qué ese interés? ¿Estaremos frente a un nuevo caso de mitopóesis?
El libro, y la leyenda urbana, habla que Bergoglio fue castigado en Córdoba, recluido durante dos años en una celda de 4 x 4 (la que ustedes ven en la foto) dentro de la Residencia Mayor de la Compañía en la calle Caseros. Sus superiores lo sometieron a un aislamiento casi total, no podía hablar con nadie y ni siquiera se le permitía comer con la comunidad. Algunos prelados y sacerdotes argentinos que lo visitaban en su destierro, lo pintan con una mirada perdida y profundamente deprimido.
¿Cuáles habían sido los motivos del supuesto castigo? Nunca lo sabremos, pero, en realidad, no son importantes. Lo que es importante es no creerse el mito que el Papa ha comenzado a construir sobre ese pretendido encarcelamiento. En esto no podemos dejar de recordar al gran San Juan de la Cruz, que fue encarcelado durante ocho meses en el convento de los carmelitas de Toledo en 1577, periodo de terrible “noche oscura”. Casualmente, es esa la expresión que están utilizando últimamente los medios periodísticos adictos al pontífice para referirse a su segundo periodo cordobés: “La noche oscura de Bergoglio”.
¿Cuál fue la realidad? Según cuentan los que saben –concretamente, jesuitas de ese periodo bergogliano-, si bien existió una especie de castigo, muy propio por otra parte de los S.J., hubo una cuota de automarginación importante y de victimización. Comía solo porque se le ocurría y eligió ese cuarto para dormir porque se le cantó. Lo que en principio fue un gesto de mandarlo lejos y ningunearlo, el P. Jorge Bergoglio se encargó de promoverlo al rango de exilio, castigo, purificación, noche oscura y demás adjetivaciones místicas. Lo tenían (¿o tienen?) por loco, por bipolar, por inútilmente agresivo; lo acusan de haber diezmado la Compañía, de generar bandos, de traicionar amistades, de vengativo, de cruel, de cínico... banalidades todas, diría Hanna Arendt. En definitiva lo acusan de ser Bergoglio. Ante lo banal de sus males, el castigo pretendió ser espejadamente banal pero el ladino P. Jorge supo cómo cambiarle el signo. Concretamente, se victimizó deliberada y fríamente, y quienes lo conocen sospechan por analogías con otras circunstancias y actitudes, que lo hizo para sacar provecho.

A otros con ese cuento.

14 comentarios:

  1. Estimado Wanderer:

    No conozco con el grado de detalle el tema, del que seguramente Ud. ha sido informado.

    Sí el puedo decir lo siguiente, como lo oí.

    Hace muchos años, siendo yo numerario del Opus Dei y siendo Bergoglio obispo auxiliar de Buenos Aires, un sacerdote de la Obra que había vivido en Córdoba en los mismos años del castigo del Papa, me comentó que lo había ido a ver a la Curia, y que lo conocía bien porque lo confesaba a Bergoglio cuando estaban ambos ahí.

    Me dijo que Bergoglio había estado castigado en Córdoba. Que fue un castigo duro impartido por los superiores jesuitas: que la razón era que Bergoglio se había alineado, contra la jerarquía de los jesuitas, con Juan Pablo II, con la intervención a la orden y, en general, por el "giro" "de derecha" implantado por el Papa polaco para toda la Iglesia.

    Me dijo también que por ese motivo -ser un Juanpablista "de derecha"- el Cardenal Quarracino lo sacó del ostracismo y lo hizo traer de obispo auxiliar de Buenso Aires. Proféticamente recuerdo que me dijo que sería el futuro arzobispo de Buenos Aires, porque era el más alineado con Quarracino y Juan Pablo II.

    Recuerdo esta graciosa expresión final del sacerdote, "el caso es similar al de otros obispos de buena línea, no tan ortodoxos como Bergoglio, que hizo nombrar Quarracino: como Aguer".

    Saludos,

    ResponderEliminar
  2. Interesante que un Papa dicte su biografia para habalr de persecucion.... eso se llama estrategia publicitaria.

    Yo solo comento que el discurso del Papa Bergoglio esta cambiando y virando 180 grados: desde hace dos dias ya no habla de los fariseos, ya no ningunea a los cristianos, es mas ya saco del lenguaje la palabra cristianos y eso, descanso ahora en la lectura porque no se ve ese claro discurso intereligioso.
    Ya ha habaldo de evnagelizacion, ya menciona a la Virgen.
    Por din se posiciono en definir el aborto, la eutanacia y los experimentos con vidas humanas.
    (aunque no menciona que la vida humana requiere respeto desde la concepcion, ya que los judios consideran que el alma llega a los 40 dias, este tema queda en el aire en el discurso del PApa)
    Sin emabrgo el discurso a los medicos catolicos quedo casi completo.
    Con lo que acostumbrados a que el discurso vira de conformidad el publico, como lo señala Lucrecia Riego ex-directora de catolic . net) en este momento ya no puede dar marcha atras, y ahora si los Lobbies estaran desilucionados.

    Por otro lado en el patio de atras , el Papa Bergoglio hoy inagura el congreso interreligiosos sobre la complamentariedad del hombre y la mujer. ( ideologia de genero en la mesa??, estaran el intituto pontificio de la familia,?? estara el instituto Juan PAblo II para la familia???, )


    ResponderEliminar
  3. Tal vez habría que revisar si el ambiente de solterones que es el clero de rito latino en general, y el de las Ordenes en particular, no es propicio a generar personalidades de este tipo. Sé que proponer el fin del celibato huele a modernismo. Pero alguien tan insospechado de modernismo como Castellani, tuvo durísimos conceptos respecto del celibato obligatorio en sus Cartas Provinciales.

    ResponderEliminar
  4. Generar bandos, traicionar amistades; vengativo, cruel, cínico. Todo ello me consta. Soy de los que se espantaron el 13 de marzo de 2013 y aun no salen de su asombro. Porque JB fue así siempre, y sigue siéndolo.

    ResponderEliminar
  5. Con Bergoglio siempre es todo confuso, pero respecto a los dos jesuitas, el propio Jalics dijo que no era verdad que JB los denunciara a él y Yoido. Lo que no hizo fue defenderlos, tal como cuenta en un vídeo la hermana de Yoido.

    ResponderEliminar
  6. Más que un anecdotario redactado por amigos, con miras a crear un personaje mítico (una especie de "Juanito Laguna" religioso), sería de gran valor que algún especialista -si se anima y lo dejan- escriba una biografía seria y bien documentada de Jorge Mario Bergoglio, hoy Papa. Hay épocas enteras de la vida del actual Sumo Pontífice que no están para nada claras. Por ejemplo: 1) Si, como se comenta en el post, hubo un tiempo en que cayó en desgracia, ¿por qué razón sucedió así?; 2) ¿cómo es que, habiendo caído en desgracia, termina siendo Padre Provincial de la Orden en Argentina; 3) ¿Por qué razón es desplazado como Padre Provincial y revoleado a Europa?; 4)Cuando regresa de Europa y es instalado en Córdoba, ¿qué hizo, cuál fue su actuación?; 5) Aquí lo más misterioso: estando en una función menor en Córdoba, ¿por qué razón el Arzobispo de Buenos Aires lo incardina en su arquidiócesis y termina siendo creado Obispo Auxiliar y finalmente Arzobispo y Cardenal Primado?. De príncipe a mendigo y de mendigo a príncipe... ¿qué fuerzas se movieron para ello?, ¿qué vinculaciones y compromisos pudo haber tejido el Padre Bergoglio para dispararse así a las mas altas cumbres?. Raro, todo muy raro. Misterio de iniquidad...

    ResponderEliminar
  7. Tratando de completar al sr. Richard, cuando y como comienzan sus devaneos con los rabinos? ...y con los rotarianos? ...y con los evangelistas...?
    Y con el ocultismo?...

    ResponderEliminar
  8. No se que dirá Richard, pero todos los nombrados son del fan club de Jorgito. Es más, lo felicitaron y celebraron cuando asumió.

    Rabbí Shankar

    ResponderEliminar
  9. Lo que más miedo de Francisco es su ambigüedad y confusión. En el sínodo impuso a la fuerza a la banda de Kasper. Si no salió peor todo fue de milagro. Va creando expectativas a todos, como queriendo contentar a todos los públicos, pero se olvida de que su misión es exclusivamente salvaguardar la Fe y gobernar la Iglesia. Más que guardar la Fe la manosea y gobierna como Don Corleone, por venganza y autoritarismo.

    Con solo lo hecho este año ha adulterado terriblemente el mensaje que la Iglesia debe dar. Tanto los propios católicos como la gente fuera de la Iglesia piensa que está haciendo una revolución contra la propia Fe católica, y es que es casi imposible no pensar que es su objetivo oculto.

    Sobre lo que cuenta el artículo de su "noche oscura" y los jesuitas entregados, uno se pone a leer por internet y comprueba que Bergoglio es experto en crear múltiples versiones sobre un mismo hecho. Unos testigos dicen que les dijo una cosa, otros que les dijo la contraria. Aunque lo escrito queda y con lo de los jesuitas su papel fue desleal.

    Rezo para que Dios le ablande el corazón, porque parece tenerlo duro como una piedra.

    ResponderEliminar
  10. En estos dos días últimos habló como un católico. El primer impulso es pensar que nos está tirando un hueso, pero quizás se da cuenta que su banda perdió por goleada en el Sínodo y les esté por soltar la mano. Y girar 180 grados.Cómo siempre hace. Y verlo empezar a imitar el lenguaje y los gestos ortodoxos, abandonando la imitación de lenguaje y gestos modernistas. Quizás hasta se arrodille en la Misa.
    Me haría mucha gracia tener que escuchar el "te lo dije" de los neocons. Y más todavía defederlo de los herejes hasta ahora sus amigos, sabiendo que todo es una farsa. Pero, si hay que hacerlo...

    ResponderEliminar
  11. Las dotes actorales de Bergoglio/Francisco alcanzan un pico de su elevada mediocridad y cinismo en ocasión de su teleparticipación en la conferencia de su compinche , el anglicano Tony Palmer, también agente del sincretismo masónico, que se puede ver en el sitio web Amazing Facts del protestante Doug Batchelor. Resulta divertido de no ser siniestro, ver a Bergoglio/Francisco haciendo "lío" a los protestantes... y ver a estos a su vez poniéndose histéricos por la audacia de ambos.

    ResponderEliminar
  12. http://videos.religionenlibertad.com/video/dloQpaVzoG/Hechos-un-lio-de-10868-avemarias

    Aqui les dejo un video que va a tener repercuciones para el PApa, y para su conversion.

    Contra los cuentarosarios la respuesta ha sido muy hermosa , mas rosarios por el Papa.

    ResponderEliminar
  13. x desgracia algunos de los que pueden hablar y no quieren les va quedando poco hilo en el carrete... una lástima

    ResponderEliminar
  14. La fuerza motora de la psicología del papa es muy Argentina, es un resentido. Allí hace pie todo lo que piensa y hace. Ánimo!

    ResponderEliminar